La marca Letizia vende. Es una noticia que abre perspectivas alentadoras y permite abrir nuevos mercados, los productos derivados de la princesa de Asturias no van a tardar en florecer. Dentro de poco veremos por ejemplo clínicas de cirugía plástica especializada en rinoplastia (que no en risoterapia) donde transformen cualquier cara con personalidad en un rostro inmóvil digno de un androide.¿Qué cara eligió Letizia en el catálogo del médico que le operó? ¿Clon de Calista Flockhart? Casi lo consigue. Ya sabía yo que Felipe era todo un Indiana Jones, un Harrison Ford en potencia...
La mala noticia sería que las marcas de ropa adoptaran los estándares corporales de la Princesa como medidas universales, porque afirman en el artículo que Letizia se pone una talla 38 desde hace años. Entonces si ella se pone una 38 de verdad, las chicas y mujeres que cabíamos en la talla 38 hasta ahora tendremos que adoptar por lo menos la talla 42, casi la 44... Ay, ¡qué duro ser plebeyo!
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