sábado, 20 de febrero de 2010

Tutankamón ¿la nueva musa de Schweppes?

¿Es el faraón más emblemático susceptible de convertirse en la nueva musa publicitaria de Schweppes? ¿Podría sumarse a la lista de famosos como Carlinhos Brown, Eduardo Noriega o el doctor House que han promocionado la bebida en los últimos años? ¿Por qué lo sería?

Por las conclusiones del examen largo y tendido de su momia que ha revelado que el egipcio murió enfermo de paludismo. ¿Qué pinta Schweppes en esto?

Muy sencillo: muchísimo antes de que Bill Gates montara una fundación de investigación sobre la malaria, mucho antes de que los laboratorios farmacéuticos sacaran los tratamientos contra el paludismo al mercado, Schweppes era un remedio contra aquella enfermedad gracias a la quinina que contiene.
Bien lo entendieron los británicos afincados en sus colonias tropicales que, a modo de medida ultrapreventiva, se pusieron a beber tónica a raudales. Eso sí, añadiéndole cantidades relevantes de ginebra al burbujeante refresco. Fue así que los mosquitos empezaron a emborracharse.

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